jueves, 16 de julio de 2015





            V


Sirena de cristal,
detenida en el fondo
de un cáliz, cuyas aguas
navegaron los labios
hirientes que te apuran.
Perdiste el corazón
siguiendo aquel velero
vacío, columbario
de una ceniza amarga
para noches sin pulso.
El viento mortecino
resplandece en tus grietas
cuando se van cubriendo
bajo los arenales
sagrados, cuando gimes
sobre los frutos rojos
del cuerpo que aún adoras.
Sirena de coral,
quizá perdiste el miedo
de espaldas a los astros,
mientras el oleaje
devuelve tu desnudo
a la orilla del hombre
cuya sola memoria
te derrama la voz
en un canto de fuego.


                                           (de RETABLO DE CENIZAS, 2011)

Lienzo de Frederick Leighton

No hay comentarios:

Publicar un comentario