domingo, 27 de octubre de 2013


                                         


            HORAS  DE  SED

 
Nuevamente las horas van abriéndose
paso entre tu condena y el silencio,
invaden lo que un día fue dominio
del gozo más carnal e irrepetible.
Las horas tienen sed, buscan tu fuente,
el único lugar donde no surges
sin la provocación de aquellas manos
que hoy vuelven a ser amargo cáliz.
Ciegamente caminas cuando el tiempo
consigue que te pierdas en su nombre
y en el de tantas cosas innombrables.
Pero las horas marcan la distancia
de orilla a muerte, de dolor a frío,
abriéndose por ti sin más empeño
que revocar la sed definitiva.


                                                              (de DANAIDE, 2012)

Lienzo de Remedios Varo

4 comentarios:

  1. Recuerdo que la lectura de DANAIDE dejaba en el lector la sensación de la elegía, esa manera de medir el tiempo desde la conciencia de la pérdida. Hoy los relojes nos regalaran una hora de sueño. Tu poema me regaló unos minutos de felicidad lectora. Un abrazo y disfruta del fin de semana, querida María.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Menos mal que el tiempo nos regala algo, aunque sea impuesto por nosotros. Gracias de nuevo, José Luis, y disfruta tú también de este domingo.

      Eliminar
  2. Horas sedientas, marcando la distancia entre vivir y aquello que imaginamos vivido.
    Abrazos, siempre

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias, Amando, por tus amables palabras y por seguir mi blog. Yo también me he asomado al tuyo y veo que es excelente, ya te sigo. Abrazos.

      Eliminar