ÁNFORA VACÍA
Tus aguas equivalen al silencio
nocturno,
cayendo eternamente sobre lo que
esperabas
sin apenas rozarlo, mostrándote
las grietas
del ánfora vacía después de
tanta lluvia.
Sólo tú recibiste a aquel recién
llegado
mientras otros arroyos te
sangraban por dentro,
conducían su savia entre las
cicatrices
que le fueron restando libertad
a tu muerte.
Oh cáliz intangible donde
brindas refugio,
cómo elevarlo ahora, con los
cielos cerrados
y una plegaria muda por todo
sacrificio.
Es difícil alzarse si unas manos
te hunden.
Sólo tus aguas sienten las
pisadas nocturnas
de aquél que se detuvo sobre lo
que ofrecías
sin llegar a habitarlo,
dejándote el venero
del corazón vacío antes de tanta
sed.
(de DANAIDE, 2012)
Escultura de Paul Oesten
Tu palabra, María, siempre tu palabra. Gracias desde la sed, desde la espera.
ResponderEliminarToda la luz, Poeta.
Y tu amabilidad, Ana, siempre tu amabilidad. Abrazos de luz.
EliminarUn abrazo del presentador de tu Danaide en Cádiz.
ResponderEliminarQué lujo de presentador tuvo mi Danaide gaditana... Abrazos.
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