lunes, 22 de julio de 2013


                        



SERENIDAD EN TODAS LAS ESFERAS,
verdina sobre el atrio,
contradicción de máscaras llorosas.
Querías sustraerte a tal dominio,
deliberar tu culpa
antes de que la noche
se convirtiera en otra epifanía.
Intentabas ser alguien
salvado del recuerdo,
llegar alguna vez a algún presente
sin sufrir la condena
del ayer o el mañana.
Miraste alrededor. Estaba oscuro.
Los óvalos dorados
se confundían entre sí, venciendo
a aquellas otras máscaras
con que el tiempo encarnaba tu memoria.


                                                 (de EL TEMPLO DEL ALBATROS, 2011)

No hay comentarios:

Publicar un comentario