sábado, 16 de febrero de 2013


                        


UNA HOGUERA, SU RASTRO
de sombra constelada,
pretendía escaparse de las ruinas.
Quizá no sea el fuego lo que has visto,
sino tu propia libertad, urdiendo
cenizas inminentes
en el lecho terrible
de la desesperanza.
Tal vez fueron rescoldos
que ignoran las razones
de tanto sacrificio maniatado,
la versátil cadena del olvido.
Una llama, sus ecos
de muerte luminosa,
emprendían sin éxito la huida,
como tu propia libertad de piedra.


                                           (de EL TEMPLO DEL ALBATROS, 2011)

Lienzo de Marina Petro

2 comentarios:

  1. Qué maravilla! Hacia tiempo que no leia poesia de verdad...soy aprendiz poeta, y profesora de español en Suiza, y me doy cuenta de la profundidad y la construccion organica, casi natural, siendo bastante sofisticada, de sus poemas. Un abrazo, Pilar

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  2. Muchas gracias, amiga Pilar, por sus amables e inmerecidas palabras hacia mi poesía. Procuro escribir lo mejor posible, es mi vocación. Otro abrazo con mi amistad.

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