lunes, 18 de junio de 2012

        
      
        Nocturno exquisito (Leticia Tarragó)



POSADA DE LA PARRA


Lo fácil que sería
morir aquí, al lado de las tapias
cubiertas de verdina,
en el hueco dejado sobre el suelo
por un claro de luna. 

Pero esto no es lo mío.
Lo mío es marchitarse lentamente,
esperar lo que nadie espera nunca,
tejer y destejer mis agonías. 

Sería, pues, tan fácil
sentir la mordedura
del áspid de tu cuerpo,
tomar un bebedizo
en la copa sagrada de tus manos… 

Pero no, no es lo mío.
La muerte me escogió para otras horas
de mayor pesadumbre, como ésta
en que pasa de largo,
sabiendo que me extingo
sin rozarme siquiera
un áspid o un veneno.


                                              (de VIVIR POR DENTRO, 1992)

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