jueves, 2 de febrero de 2012

                      


         LOS  AMORES

                            Los amores llegaban arropados
por la lluvia que huía,
con el rumor del viento en los zaguanes,
mecidos sobre el triste
goteo de las húmedas farolas.
Después de aquella época,
quisieron renacer de entre los rostros
vagabundos, ausentes por las calles
que ellos inventaron, donde no era posible
otro milagro ya, ni otra presencia.
El amor necesita más delirio
para volver atrás, cuando la muerte,
revestida de lluvia,
se convierte en su guía
y le muestra unos cuerpos, unas calles, sus grises,
los que nunca podrán aniquilarlo
aunque no tengan rostro,
ni zaguanes oscuros,
ni farolas meciéndose
al compás de otro llanto que no sea el del cielo.


                                                 (de DOS LENTAS SOLEDADES, 2002)

2 comentarios:

  1. Pero mira que eres gran poeta María. Con esa poesía extraordinaria y sencilla, tímida a veces, que va diciendo con pasmos la maravilla, y esa alma que en ti habita.
    Enhorabuena. Una y mil veces. Y gracias.
    Guillermo Urbizu.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias a ti, Guillermo, por seguir y apoyar mi poesía desde el principio, tú si que eres grande. Besos.

      Eliminar